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La curtiembre
de liebres
y la fábrica de sombreros Lagomarsino.
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Entrevista
realizada por El Recopilador, en el año 2004
al vecino Don Roberto Rossi, del Barrio Villa Rebasa,
sector de la ciudad de Ramos Mejía..al vecino Don Roberto Rossi, del Barrio Villa Rebasa,
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-Originada allá, por los años 1940-45, tenía Villa Rebasa su propia curtiembre,
en la que se trataban pieles de liebre que luego servirían para la fabricación
de los entonces tan utilizados sombreros.
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Para el
curtido de aquellas pieles se empleaban ciertos productos químicos, altamente
nocivos para los operarios, haciéndolo un trabajo insalubre, que resultaba en
todos aquellos muchachos y hombres
grandes, siendo morochos, sus bigotes, cabellos y cejas fueran casi siempre de
un blanquecino rubio.
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“-Yo mismo trabajé en esa curtiembre cuando tenía 13 años… y hasta los 15, en que me fui porque me afecto mucho la salud, y me inicié entonces en la fabricación del calzado.”
“-Yo mismo trabajé en esa curtiembre cuando tenía 13 años… y hasta los 15, en que me fui porque me afecto mucho la salud, y me inicié entonces en la fabricación del calzado.”
(Cuenta Don Roberto Rossi,
vecino que vive desde hace cuarenta años
en una de las esquinas de aquella manzana donde estuvo dicha industria,
Av. Eva Perón y Balcarce, y que llegó tres veces a ocupar cargo de
Concejal por la UCR, en el H. Concejo Deliberante de La Matanza).
en una de las esquinas de aquella manzana donde estuvo dicha industria,
Av. Eva Perón y Balcarce, y que llegó tres veces a ocupar cargo de
Concejal por la UCR, en el H. Concejo Deliberante de La Matanza).
Y
prosigue: “Aquellos cueros de liebre,
según la parte del animal (la panza, el lomo, cabeza, pecho, etc.) su pelo era apartado y embolsado
separadamente y lo llevaban a la fábrica de sombreros que no estaba aquí, sino
en el barrio del Once, si mal no recuerdo en Junín al 600, tratándose de la
fábrica de sombreros Lagomarsino; porque insisto, aquí se hacía el trabajo rudo
del curtido de las pieles de las liebres, pero al sombrero se lo armaba en el
centro.
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La curtiembre
era propiedad de dos cuñados, Rolando Lagomarsino y Ricardo Guardo. Guardo fue Ministro
de Guerra y Lagomarsino Ministro de Comercio del primer gobierno de Perón; y
ambos además, eran dueños de varios terrenos de Villa Rebasa, entre los cuales
se encontraban los que hoy ocupa el “Parque
Municipal Leandro N. Alem” (popularmente identificado por los vecinos como “Flecha”).
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Por 1958,
Lagomarsino y Guardo deciden vender sus últimos terrenos y como nuestro barrio
se había quedado sin ningún espacio verde
-porque hasta la reserva fiscal para la plaza habían vendido los
Rebasa-, entonces se realizó una
movilización vecinal que logró impedir el loteo, y tras una lucha de seis años,
se consiguió la Ley de expropiación (17 millones de pesos del año 1966), con la
que se concretó el Parque.
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Ya, a mediado
de los años ’50, la moda fue dejando de lado el uso del sombrero, y caída la
industria la curtiembre se cerró y tras de ella vino el señor José Varela,
quien compró los galpones e instaló una Fabrica de Autopartes, para aquel tan
notable automóvil que fue el Torino –a partir de 1964/65- y que duró algo más
de una década, ocupando una mano de obra de más de un centenar de obreros.
Por ese entonces tuve un comercio de “parrilla”, que a la vez de estar en la
esquina de Eva Perón y Balcarce, también daba al interior de la parte posterior
de la fábrica y de donde todo su personal venía a comer.
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Luego de la
fiebre del Torino, el trabajo cayó en la fábrica, pero igual se prosiguió
elaborando autopartes, aunque en menor producción y mucho menos personal.
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Finalmente,
el señor Varela, en el año pasado -2003- cerró definitivamente y se demolió
todo y hoy está la superficie libre, con una venta de lotes y una casi
centenaria arboleda, aguardando un nuevo destino”.--
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En el extremo opuesto, misma esquina de Larrea y Posadas, años 2005 y 2006;
y finalmente departamentos construidos en 2006/ 2007.-
Don Roberto Rossi falleció el 12/ 08/
2010.-